La artrosis es la forma más común de artritis y afecta a millones de personas en todo el mundo. Se produce cuando el cartílago protector que amortigua los extremos de los huesos se desgasta con el tiempo.
El dolor y la limitación pueden tener solución con terapia.
En la clínica buscaremos mejorar el movimiento, la función de la articulación y por lo tanto reducir el dolor.
Aunque la artrosis puede dañar cualquier articulación, el trastorno afecta más comúnmente a las articulaciones de las manos, las rodillas, las caderas y la columna vertebral.
Los síntomas pueden ser todos o algunos de los siguientes.
- Dolor. Las articulaciones afectadas pueden doler durante o después del movimiento.
- Rigidez. La rigidez en las articulaciones puede ser más notoria al despertar o después de estar inactivo.
- Sensibilidad. Es posible que su articulación esté sensible cuando aplicas un poco de presión sobre ella o cerca de ella.
- Pérdida de flexibilidad. Es posible que no puedas mover la articulación en todo su rango de movimiento.
- Sensación chirriante. Es posible que sientas una sensación chirriante al usar la articulación y que oiga chasquidos.
- Osteofitos. Estos pedazos adicionales de hueso se sienten como bultos duros y pueden formarse alrededor de la articulación afectada.
- Hinchazón. Esto puede producirse por la inflamación de los tejidos blandos alrededor de la articulación.
El Tratamiento con Fisioterapia.
Un fisioterapeuta puede mostrarte ejercicios para fortalecer los músculos alrededor de tu articulación, aumentar tu flexibilidad y reducir el dolor.
Además aplicaremos medios físicos como termoterapia, ultrasonido y electroterapia TENS para acelerar el proceso de alivio y recuperación.
En la clínica manejamos tratamientos que van desde las 6 semanas, si el desgaste aun no es muy avanzado podríamos evitar la cirugía de prótesis con constancia y tratamiento adecuado.